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e la redacción de INFORME DIGITAL A casi un año de las elecciones nacionales de la Central de trabajadores argentinos (CTA) sigue la polémica por la conducción de la entidad y la disputa entre los sectores que encabezan Hugo Yasky y Pablo Micheli. “Hay mucha paridad, sectores muy fuertes dentro de la CTA y un quiebre político que no lo va a solucionar ni la justicia ni las 54 urnas en las que se volvería a votar”, dijo a radio f5 el secretario general de Entre Ríos, Luis Gálligo. El dirigente consideró, en cambio, que el problema podría superarse con “un gran debate interno” y en ese sentido destacó que en la provincia convocarán próximamente a una mesa ampliada de la CTA “donde queremos discutir esto para plantear a nuestras conducciones a nivel nacional porque en Entre Ríos tenemos la suerte de tener la CTA unida, los dos sectores estamos juntos”. Unidos con la CGT en el Consejo del Salario Por otro lado, Gálligo se refirió a la decisión de la central de unificar postura con la CGT –a la que nacieron enfrentados- en el Consejo nacional del salario: “ahí vamos a determinar el sueldo mínimo que no tiene que ser inferior a los 2.600 pesos, un 25 o un 30 por ciento (de aumento) sobre los 1.840 pesos del año pasado”, indicó. “Queremos aunar criterios con las otras organizaciones sindicales que integran la mesa del salario para tener más fortaleza”, fue su explicación sobre la posición conjunta con la entidad que conduce Hugo Moyano.