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pedido de la madre y abuela de las mujeres que murieron calcinadas en su casa de barrio Humito a principio del mes pasado, se constituyó como querellante particular el abogado penalista Marcos Rodríguez Allende. En la causa se encuentra imputado Adrián Ávalos, de 28 años, condenado por abusos sexuales, pero que recuperó la libertad luego de casarse con una de las víctimas y merced al permiso del un juez de Ejecución de Penas. El hecho ocurrió el 8 de agosto pasado. Las víctimas, Vanina Hemerling, de 35 años y su hija, Adriana Cetau, de 17, fallecieron carbonizadas luego de haber sido golpeada una de ellas y puesta en estado de indefensión la otra. Sus cuerpos fueron hallados entre dos colchones de gomaespuma que fueron incendiados por el homicida, quien también había tapado todo orificio que sirviera de ventilación en la humilde casa de dos habitaciones ubicada en el corazón de barrio Humito de Paraná. Pasos El letrado querellante informó que en la causa que investiga el Juez Grippo “se están tomando declaraciones testimoniales”, luego de formalizar su presencia como querellante en la antevíspera. El imputado “ha requerido y va a ampliar la indagatoria, porque ha habido una reformulación de los acontecimientos”, indicó. “Tenemos que tener en cuenta que una de las mujeres que aparece fallecida en el lugar, se encontraba con un embarazo de aproximadamente tres meses”, destacó el abogado. “Este es el hecho aberrante con el que nos encontramos, estimamos que la imputación tiene que circunscribirse en la muerte de tres personas, una en gestación, y recordemos que esta humilde casa se encontraba con el candado puesto, donde Ávalos evidentemente premeditó esta situación, y organizó de tal manera los sucesos, que era imposible que se salven”, puntualizó. Dijo que la calificación legal, “no la tenemos, porque el juez de Instrucción la va a poder plasmar en el expediente, una vez que resuelva la situación procesal de Ávalos”. El acusado es considerado responsable del doble crimen acontecido en el barrio Humito permanece alojado en el Penal de Paraná. El hombre contaba anteriormente al hecho trágico de barrio Humito, con libertad condicional en cumplimiento de una condena por violación. Desazón El malestar se evidenciaba desde distintos sectores que siguen con atención esta causa, debido a que habría trascendido que luego de que el equipo interdisciplinario informara al juez de Ejecución de Penas las condiciones en las que se encontraba Ávalos para ser excarcelado, recibió dos opiniones negativas, que provenían de la fiscal Cecilia Goyeneche y del procurador General del Superior Tribunal de Justicia, doctor Jorge García. No obstante esto, Ávalos ganó la calle y tras contraer matrimonio legal con Hemerling, se fue a vivir con ella, con su hija de 17 años y con otro menor de 10 años, que ese día salvó su vida por estar de visita en la casa de un pariente. Fuentes policiales confirmaron a esta Hoja que existieron denuncias de violencia familiar de un año a esta parte –desde que el imputado recuperó la libertad– y que pese a esto, el grupo seguía bajo el mismo techo.