L
a Agrupación “Rojo y Negro”, que lidera Agmer Paraná, salió al cruce de la acusación que formuló la Lista “Integración” de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), que asumirá la conducción provincial en marzo. Integración apuntó contra el secretario general del gremio a nivel provincial, César Baudino, que concluirá su mandato el 3 de marzo, mientras que “en el ámbito de la Seccional Paraná asumió el 2 de enero como secretario adjunto”, se señaló. Lo que “Integración” sostenía era que Baudino incurría en “incompatibilidad” por estar en los dos cargos, y hablaba de “acaparamiento de cargos directivos en una entidad de la importancia de Agmer” que sería “sinónimo de abuso de poder”. Pero desde la “Rojo y Negro”, la agrupación sindical de Baudino, emitió un comunicado rechazando de plano la acusación. Explicó que el dirigente “solicitó licencia como secretario adjunto de la seccional Paraná ni bien asumido, para así completar su mandato como secretario general de Agmer” y “está siendo reemplazado por la vocal Manuela Ruiz” en ese cargo, explican en un comunicado. En el comunicado de prensa que emitió la agrupación Rojo y Negro, que ganó la seccional Paraná en noviembre de 2011, repudian “la mentira que un sector minoritario de Agmer Paraná echó a correr: que el secretario adjunto en uso de licencia, César Baudino, estaba acaparando cargos. Lo que los autores de tal difamación olvidan mencionar es que la situación que se vive en el gremio es consecuencia de lo que sus propios compañeros de lista provocaron hace tres años, cuando con el fraude intentaron impedir el triunfo de la lista Rojo y Negro y obligaron la postergación de la asunción de autoridades provinciales hasta marzo de 2009”. “Los difamadores buscan ensuciar a la Rojo y Negro y a la lucha de Agmer partiendo de la idea de que nada les sirve más que el compañero docente de base termine pensando que los militantes de Agmer son todos iguales, que todos son como ellos”, afirman. “Rechazamos cualquier intento de operación que procure violentar nuestro desarrollo institucional. Mal que le pese a quien hoy quiera ser funcional al gobierno, a los trabajadores entrerrianos nadie nos va a desviar de nuestras preocupaciones actuales: la necesidad de un aumento salarial que vaya más allá que un magro 18 o 25% y que sea en blanco, y de negociaciones paritarias sin techos salariales”, concluye la dura respuesta de la agrupación docente.