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os municipales de Concepción del Uruguay definirán este martes los pasos a seguir, luego de que este martes se suspendiera una nueva reunión con el intendente Carlos Schepens, quien viajó a Paraná al encuentro de la Liga de Intendentes Justicialistas. Según Mario Barberán, secretario General de la Asociación de Obreros y Empleados Municipales (AOEM), los empleados seguramente se inclinarán por un paro con movilización para el jueves, una medida que había quedado pendiente. “Teníamos una reunión esta mañana con el Intendente, pero finalmente se suspendió. Resulta que está en Paraná con la Liga de Intendentes. Ahora nos convocaron para el jueves, a las 9, pero nosotros resolveremos qué haremos esta noche en asamblea, a las 20. Seguramente, como viene la mano, con el discurso que dio el viernes, en la apertura de sesiones del Concejo Deliberante, con esta demora, la falta de seriedad y desprolijidad, la asamblea decidirá medidas de acción directa que quedaron pendientes”, indicó Barberán. Según añadió el dirigente, en la última asamblea municipal habían decidido un “paro con movilización desde el jueves”. “Schepens, en la sesión del Concejo, fue muy contradictorio con respecto a los empleados municipales, porque primero los consideró fundamentales, sobre todo en educación, salud, electrotecnia, en aguas y cloacas, pero luego terminó demandando que hay muchos empleados administrativos, pero pocos en la calle con oficio. Sin embargo, ni el gremio ni los empleados tenemos el mandato para sacar gente de las oficinas y decirles que vayan a cumplir otras tareas: es un mandato que tiene el Ejecutivo”, recordó. En este sentido, Barberán aseguró que esas declaraciones “cayeron muy pesadas en las familias municipales, muy antipáticas. Eso se suma a la falta de manejo de agenda y desprolijidad que provocó la suspensión de la reunión de hoy. La cosa está más tensa que antes”. El sindicalista también recordó que el primer martes de febrero debía realizarse una reunión de negociación, tal como habían acordado las partes, pero no se concretó. “Más allá de la reunión de la Liga de hoy, Schepens tenía como mínimo 30 días como para entablar un diálogo, porque hubo una reunión preparatoria con sus funcionarios los últimos días de enero”, detalló. Los trabajadores piden recomposición salarial del 36%, una solicitud que forma parte de una nómina de 23 puntos.