E
l titular de la cartera económica, Hernán Lorenzino, se ubicó en la cabecera de la gran mesa dispuesta para el debate, junto al viceministro de Economía, Axel Kicillof; el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno; el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray; y la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont. Los esperaban buena parte de las tres comisiones que tienen a su cargo el estudio del proyecto de ley. El debate lo coordinó el senador Aníbal Fernández en su rol de presidente de la estratégica Comisión de Presupuesto y Hacienda, cabecera del plenario que incluye a las comisiones de Economía e Inversiones y de Justicia, dónde también estuvo el senador entrerriano Pedro Guastavino. Lorenzino fue el primero en exponer y aseguró que este proyecto, que se compone de dos instrumentos financieros y un régimen de exteriorización de divisas, busca seguir "en la senda del crecimiento y de la creación del empleo". Sostuvo que se posibilitará la recuperación de "recursos ociosos, en cajas de seguridad y fuera del país o en paraísos fiscales, y transformar esos ahorros en inversiones e incorporarlos en el circuito productivo, para que se siga apuntalando el modelo de desarrollo". Lorenzino se preocupó en resaltar que "no existe razón por la cual se vaya a incurrir en una devaluació". La presión ejercida desde algunos sectores para conseguir una devaluación sobrevoló el debate que se desarrolló el jueves en el Senado. Tal como indica Tiempo Argentino, el secretario de Políticas Económicas, Axel Kicillof, señaló al respecto que “no va a haber ninguna devaluación. No se dejen engañar. Cuando los diarios dicen todos los días que se va a devaluar, lo que buscan es lo que se llama profecía autocumplida”. A su vez, subrayó que una devaluación trae “aumento de la pobreza y el desempleo y pérdida del poder adquisitivo de los asalariados” y sostuvo que “con el ánimo destituyente se ha llegado a negar la realidad”.