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l encuentro se desarrolló en el Hotel Patagonia desde las 14.30, junto a miembros del gabinete nacional, empresarios y sindicalistas, en el marco del diálogo convocado por la jefa de Estado. Antes, en un acto, pidió "derribar los mitos" de la economía. La diplomacia oficial se ubicó en el centro de la mesa principal, acompañada por su equipo de gobierno. A su izquierda estuvieron Débora Giorgi (Industria), Julio De Vido (Planificación Federal), Carlos Tomada (Trabajo) y Carlos Zannini (Legal y Técnica) mientras que a su derecha se colocaron Hernán Lorenzino (Economía), Axel Kicillof (Vice de Economía), Marcó del Pont (Banco Central) y Ricardo Echegaray (AFIP). También estuvieron los representantes del empresariado: Héctor Méndez (UIA), Gustavo Weiss (Construcción), Jorge Brito (ADEBA), Eduardo Eurnekian (Comercio), Juan Carlos Fábrega (Banco Nación), Carlos Heller y Osvaldo Cornide (CAME) y a en el ala derecha se acomodaron Antonio Caló (CGT), Ricardo Pignanelli (SMATA), Hugo Yasky (CTA), Ider Peretti (CEA) y Marcelo Fernández (CGERA), consignó Infobae. En la mañana de este miércoles, los empresarios participaron del acto de adjudicación de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic a la UTE integrada por Electroingeniería, Gezhouba e Hidrocuyo. En el acto, la presidenta Cristina Fernández adjudicó las obras para la construcción de las represas "Néstor Kirchner - Jorge Cepernic" en el Río Santa Cruz, que sumarán 15% a la generación hidroeléctrica. "Sueño con una Argentina lo suficientemente informada como para que nadie vuelva a meterles el perro" afirmó la mandataria y agregó: "Todos tenemos que poner nuestras neuronas en lo que estamos de acuerdo". Durante su discurso destacó que la construcción de las represas "Néstor Kirchner" y "Jorge Cepernic", ya que es "muy importante para los santacruceños, pero de carácter estructural para el país". En ese marco, la mandataria destacó "Esta construcción era casi una aventura, una empresa imposible de realizar. El río Santa Cruz, uno de los de mayor caudal, era el único que no tiene una represa hidroeléctrica y ahora tendrá una de las más grande después de Yaciretá". Críticas a la adjudicación de las represas El presidente del bloque de diputados nacionales de la UCR, Ricardo Gil Lavedra afirmó que: “Cristina adjudicó lo que va a ser el hecho de corrupción más escandaloso de esta verdadera década desperdiciada”. "No es casualidad que (Lázaro) Báez pierda la licitación después de los recientes escándalos mediáticos, y que quien la gana sea otro amigo de De Vido. La licitación padeció las mil y unas irregularidades, y la adjudicación final no es la excepción”, dijo Gil Lavedra al Semanario Parlamentario. “De Vido dice en un comunicado que todo es transparente, pero se escuda en las más burdas chicanas para negar información que debería ser pública”, explicó Gil Lavedra, en relación con un pedido de acceso a la información que le fuera denegado con el argumento de que ese mecanismo está reservado para ciudadanos y no para diputados, como si los diputados no fueran ciudadanos. “Dice además que un descuento en el precio de la licitación es en beneficio del pueblo argentino, pero la mejor forma de beneficiar al pueblo es dejando de adjudicar obras a los amigotes. Sin duda, eso nos va a salir más barato a todos los argentinos”, remarcó Gil Lavedra. Por su parte, el radical chaqueño Hugo Maldonado calificó de “nuevo acto de campaña” la adjudicación de la obra y sostuvo que la Justicia debería suspender la adjudicación, como se ha pedido desde la oposición en el Congreso Nacional. Maldonado señaló que “la licitación ya soporta un proceso penal por sospechas de irregularidades y la oferta fue adjudicada gracias a una insólita Carta de Descuento del 17 % del precio. Las turbinas no se fabricarán en el país y se van a montar para proveer 1740 megawatts de potencia, en un curso de agua que solo permite generar un promedio de 500. El costo por kilowatt/hora que se producirá en Santa Cruz será de 300 dólares, cuando las familias pagan 8 y la industria 60 dólares promedio en la actualidad”. “Está muy claro que para que las nuevas represas sean rentables hará falta aplicar un tarifazo enorme sobre los precios de la electricidad. Esto va a causar un perjuicio patrimonial millonario al país, por el que va a responder en el futuro el Estado nacional”. El diputado chaqueño agrega que “Santa Cruz recibíó desde 2003 muchos más recursos para obras viales que cualquier otra provincia y un 74 % de esos recursos fueron para Lázaro Báez. Es un verdadero despropósito adjudicar estas obras con un costo de más de 20.000 millones, que sólo se explica como un negocio del poder”, concluyó.