C
uatro encapuchados en moto balearon este viernes por la noche la casa del gobernador Antonio Bonfatti en el barrio Alberdi, zona norte de la ciudad. Los encapuchados, que se trasladaban en dos motos, dispararon 14 veces contra el frente del domicilio del mandatario, en Darragueira y Gallo, de la ciudad de Rosario. Según publicó Rosario3.com, al menos diez balas impactaron contra la vivienda y dos directamente ingresaron hacia el living, cerca de donde estaba Bonfatti junto a su esposa viendo el partido de Argentina. Ninguno de los integrantes de la familia sufrió lesiones, señalaron fuentes del Ministerio de Seguridad. Desde el gobierno provincial se leyó la situación directamente como un atentado contra el mandatario, no sólo un acto de amedrentamiento. Se acercaron al lugar los ministros de Gobierno y de Seguridad, Rubén Galassi y Raúl Lamberto. También acudió la fiscal de Cámara Cristina Rubiolo. Además, hubo comunicaciones con el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni; el ministro de Defensa, Agustín Rossi; y el jefe de Gabinete, Juan Abal Medina. Todos ellos expresaron un firme repudio al hecho, como prácticamente todo el arco político provincial y nacional. La Policía contó e identificó 14 casquillos de bala tirados en el piso del lugar. Eran de proyectiles calibre 11.15 y 9 milímetros, como los que usan las fuerzas de seguridad. Los atacantes dispararon y se dieron a la fuga. No se deslizaron hipótesis del motivo del ataque, aunque en los últimos tiempos se produjeron varias amenazas contra ministros y funcionarios del área de Seguridad vinculadas a las causas contra las bandas narcotraficantes. Este viernes justamente procesaron a 13 personas vinculadas a la producción y venta de drogas, según publicó el Centro de Información Judicial (CIJ). Las últimas intimidaciones se produjeron hace un mes y el ministro de Seguridad Lamberto las calificó de “muy graves”. “Son amenazas que persisten y se incrementan”, advirtió el funcionario entonces. En junio, el juez Juan Carlos Vienna y otros funcionarios del Ejecutivo provincial que intervienen en la investigación de hechos delictivos vinculados al narcotráfico, también habían sufrido graves intentos de amedrentamiento.