D
e la redacción de INFORME DIGITAL La intendenta de Paraná, Blanca Osuna, dispuso un operativo de emergencia para dar una solución a la recolección de residuos. En el mediodía de este lunes, una cuadrilla de municipales se movilizó en los camiones del área de recolección de basura Comuna para dar un alivio a las quejas de los vecinos paranaenses. El operativo se da en el marco del conflicto con los cuatro sindicatos municipales que mantienen en vilo a la administración Osuna. La intendenta brindó una conferencia de prensa en la que atribuyó el paro a una maniobra del sindicalista y diputado provincial Hugo Vásquez. También denunció la existencia de amenazas a trabajadores y actos de sabotaje contra unidades de trabajo municipal. “Es un operativo que busca hacer cumplir una tarea que corresponde a la municipalidad y los municipales”, arrancó Osuna. Luego hizo mención a la medida judicial que ratificó la intervención del Sindicato Único de Obreros y Empleados Municipales (Suoyem), tras una presentación de Vásquez y Fernando García. “La semana pasada la justicia Federal del Trabajo dejó en claro la invalidéz de una presentaciones realizada por los señores Vásquez y García”, recordó la presidenta municipal. En ese marco, pidió que se respete el dictamen de la justicia y que se retomen las tareas: “observamos que parte del rechazo de algo que es de cumplimiento y respeto obligatorio como es un dictamen de la justicia. Más adelante calificó a la huelga como un acto de ilegal: “este formato que adoptó de autoconvocados es de absoluta ilegalidad”, dijo. “Ha habido hasta la semana pasada amenazas con armas de fuego, con miguelitos que han dificultado la prestación del servicio y eso trae consecuencia. Esperamos que la justicia actué en este caso”, refirió Osuna y añadió que se realizaron las denuncias correspondientes en la justicia y la policía y que fueron identificados los presuntos autores de los hechos. Al finalizar, la intendenta paranaense consideró que “la protesta busca ocultar, una especie de desapego con las normas y con el cumplimiento del trabajo. Estas acciones operan como un elemento de presión para negociar no sé qué cosa”. Cerró convocando a los trabajadores que de “buena fe” a que presten el servicio y que no sean “carne de cañón de quienes tienen a otros intereses”.