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e la redacción de INFORME DIGITAL El "Programa de convergencia de tarifas eléctricas y reafirmación del federalismo eléctrico en la República Argentina", que congeló las tarifas en las provincias, vence el próximo 31 de diciembre. En Entre Ríos ya se anunció que el aumento se dará a partir del 1º de enero y será de un 20 %. En otras provincias, las subas promedian casi el 30%. Santa Fe, por citar el caso más cercano, ajustará su tarifa el 27%. Desde mediados de diciembre el Gobierno nacional habilitó una última batalla del año con las provincias por la suba de las tarifas eléctricas. Y es que el Ministerio de Planificación que dirige Julio De Vido enfrenta las quejas de algunas provincias para su plan de “convergencia tarifaria”, que implica un congelamiento de los precios de la luz para 2015. De Vido logró el lunes pasado ese compromiso de no aumento por parte de los gobernadores de Jujuy, Neuquén, Santa Cruz, Formosa y Tierra del Fuego. Desde el lunes, según publicó Clarín, tratará de convencer a funcionarios de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, San Luis y Tucumán, que ya habían anunciado incrementos en las boletas. La provincia de Buenos Aires también estudiaba un ajuste para las distintas distribuidoras que funcionan en su territorio. El acuerdo que vence Cabe recordar que en abril de este año, los representantes de las 18 cooperativas eléctricas de Entre Ríos; de Enersa, el titular de la Secretaría de Energía de Entre Ríos, Raúl Arroyo, y el interventor del Ente Regulador de Energía de Entre Ríos, Marcos Rodríguez Allende, firmaron en el edificio del Ministerio de Economía de la Nación el acuerdo que ya había generado el gobernador Sergio Urribarri cuando la provincia adhirió al Plan Nacional de Convergencia Tarifaria. El acuerdo sellado a principios de 2014 entre la Casa Rosada y los gobernadores estipuló un congelamiento de tarifas para 2014 -a los valores vigentes al 31 de diciembre de 2013-, a cambio de financiamiento nacional para obras eléctricas. Pero con el inevitable incremento de los costos de la prestación del servicio y la tarifa frenada por 365 días se ha acumulado la presión sobre los precios. A pocos días de comenzar un nuevo año el Gobierno acelera las negociaciones, ya que necesita asegurarse un freno en la inflación, en un año electoral.