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e la redacción de INFORME DIGITAL El Director Ejecutivo del PAMI (Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados) Carlos Regazzoni sugirió que "las personas de 65 años están muy bien y pueden seguir trabajando" e instaló en la agenda pública la polémica por el aumento de la edad jubilatoria. El Defensor de la Tercera Edad Eugenio Semino dijo que la eventual medida "carece de todo sentido". El funcionario nacional dejó entrever que se podría postergar la edad jubilatoria porque “en el mundo, la gente a los 65 años está muy bien, puede seguir trabajando. Y la medicina les recomiendan que sigan trabajando porque es lo que mejor mantiene la mente en forma“. A su vez, indicó como argumento que “es difícil, dentro del PAMI, que antes de los 72 años una persona empiece a tomar algún remedio o tenga problemas médicos. Por lo cual estamos hablando de siete años en los cuales prácticamente hace la misma vida que hacía cuando estaba activo”. Insistiendo en el argumento precitado, Regazzoni remarcó en declaraciones a La Nación que "la medicina dice que lo mejor es seguir trabajando porque es lo que mejor mantiene la cabeza. Yo lo que creo es que la gente tiene muchos años de vida saludable por delante. Una persona cumple 65 años y tiene muchísimos años por delante, y eso es algo que tenemos que celebrar". En la Defensoría de la Tercera Edad sonó la alarma y salieron a responderle al funcionario macrista. Semino aseguró que "no tiene sentido" llevar la jubilación por encima de los 65 por la falta de creación de puestos de trabajo y el alto porcentaje de empleo negro en el país. "Si se amplía en dos o cinco años, lo que va a hacer es estancar el ingreso al mercado de trabajo. Aumentar de 65 a 70 años la edad jubilatoria significa que no entrarán al mercado de trabajo los chicos de 18 a 23 años porque no se están generando nuevos empleos", evaluó. El Defensor también consideró "banal" el debate y que "en la Argentina hay dos datos: tenemos un mercado laboral con una gran expulsión y más del 40 por ciento de trabajadores en negro". Respecto del financiamiento de las jubilaciones en el país, Semino explicó que "hoy tiene dos fuentes: por un lado, la tradicional, que es el trabajo, con la dificultad de que el 40 por ciento de trabajo en negro no aporta absolutamente nada. Y la otra es la impositiva, donde el impuesto que más plata está poniendo para la seguridad social es el IVA, que aporta el 17 por ciento, y es el más regresivo. Por eso es endeble el financiamiento".