El edecán presidencial, Sebastián Ibáñez, en representación del presidente Mauricio Macri, visitó la ciudad de La Paz este miércoles, de donde es oriundo, para celebrar el bautismo de Manuela, séptima hija mujer de una familia de apellido Maldonado, que reside en el barrio Belgrano de dicha ciudad costera. El acto fue posible porque en la Argentina la Ley 20.843 garantiza el padrinazgo del Presidente de la Nación en funciones al momento del nacimiento del séptimo hijo varón o la séptima hija mujer en una familia. "El padrino se ocupará de costear todos sus estudios primarios, secundarios y universitarios y estará para todo requerimiento que sea necesario", se establece. La madrina, en tanto, fue la directora de Cultura de la Municipalidad de La Paz, Alejandra Miranda. El edecán presidencial destacó que para la niña paceña ser ahijada presidencial es algo que será para toda la vida, porque no sólo lo es de Macri sino de todos los que lo sucederán, publicó Santa Elena Digital. Mal antecedente para Macri El mes pasado una situación distinta tuvo lugar en San Rafael, localidad ubicada al sur de Mendoza, cuando un matrimonio intentó bautizar a su séptimo hijo varón, Tiziano de 4 meses, pero ninguna Iglesia católica aceptó hacerlo, al advertirles que el presidente es divorciado y no está casado por iglesia con la primera dama, Juliana Awada.