E
l presidente Mauricio Macri anunciará el próximo miércoles ante la Asamblea Legislativa el envío de un proyecto de ley para crear un régimen penal juvenil entre los 14 y los 18 años. Si bien todavía no está finalizada su redacción, la idea es que los menores que delincan tengan una condena penal, pero enfrenten un procedimiento oral más ágil y tengan condenas específicas para niños, es decir una escala penal distinta a la de los adultos. Según adelantaron desde el gobierno, la baja de la imputabilidad no será para todos los delitos y tampoco acarreará necesariamente la privación de libertad. El jueves pasado, en la mesa técnica organizada por el Ministerio de Justicia en la que se debatió el tema, la mayoría de las organizaciones especializadas se mostró contraria a la baja. "El miércoles, el Presidente anunciará el envío de una ley para crear un régimen penal juvenil, entre otras iniciativas del año pasado y otras nuevas que se van a presentar. No se mencionará la fecha de envío ni a qué Cámara va a ingresar, pero ya hay una comisión trabajando en la redacción del proyecto desde el inicio de las mesas de discusión en febrero y estaría listo para principios de marzo", afirmó a La Nación Martín Casares, subsecretario de Política Criminal del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. "Tenemos que tratar de encerrar a la menor cantidad de chicos posible" En cuanto a la edad de imputabilidad, Casares confirmó que "hay que ver qué nivel de respuesta se les da a los chicos de 14 y 15 años que cometen hechos graves. Estamos trabajando en dos franjas etarias de los 14 a 16 y de los 16 a 18, pero el jueves oímos que la mayoría de las organizaciones se opuso. Queríamos escuchar las voces pero necesitamos dar respuesta a esos casos. Hoy la respuesta es discrecional". El funcionario comparó el caso de un chico de 12 años privado de libertad en un instituto sin condena y el del supuesto autor del crimen de Brian Aguinaco que fue liberado y enviado Perú. "Los casos de menores de 16 años en institutos nos costaron un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Estas situaciones son irrespetuosas de la Convención de los Derechos del Niño. Son chicos que, bajo el régimen tutelar, no se han podido defender" A pesar de esto, Casares señaló que "la baja de la edad de imputabilidad no sería para todos los delitos y tampoco acarrearía necesariamente la privación de libertad. Se podría bajar la edad para los delitos más graves. Según los psicólogos y psiquiatras, un menor de 16 puede entender que matar está mal y quizá no lo que es un hurto, un robo. Tenemos que tratar de encerrar a la menor cantidad de chicos posible". Para el Gobierno, los procesos, las penas y la duración de la condena deberían ser "específicos para niños. Un año o dos no son iguales para un niño que para un adulto. La idea es que los procesos sean más cortos, que el procedimiento sea oral y más ágil y que el tiempo en los institutos sea el mínimo, en los casos de encierro. También las penas podrían ser revisables cada determinada cantidad de tiempo". De acuerdo con esto ejemplificó que un chico menor de 16 años que comete un homicidio "no debería tener una pena de 8 a 25 años, sino que la escala penal podría ser de 4 a 12 años, ya que le primera no se le podría aplicar siguiendo estándares internacionales porque sería el doble de la edad en que cometió el delito. No tenemos aún la fórmula".