E

l asesinato de la joven entrerriana Micaela García dejó expuesto al juez que permitió que el asesino estuviera libre y paralelamente al exintegrante de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni, cuyas posiciones garantistas lo pusieron por este tema en el centro de la polémica en las redes sociales. El magistrado se quitó el sayo y se lo puso en cambio a Sergio Massa, a quien responsabilizó porque Sebastián Wagner estuviera en libertad. Zaffaroni acusó al líder del Frente Renovador de carecer de escrúpulos y lo culpó de frenar el anteproyecto de reforma del Código Penal que, en caso de haber sido aprobado hubiese dificultado la libertad del asesino de Micaela. Tras recordar que en el anteproyecto en el que trabajó en 2012 trabajaron por ejemplo el entonces diputado Federico Pinedo y los juristas León Arslanián y Ricardo Gil Lavedra, Zaffaroni recordó que al presentarse el proyecto, “Sergio Massa, con una falta de escrúpulos nunca vista y sin precedentes en la historia política, logró colocarse y frenar este proyecto en una muestra de lo trepador que es”. Según detalló a FM La Patriada, “si Massa no hubiese hecho eso, lo que pasó con Micaela no pasaba, porque hubiesen tenido que peritar al asesino con varios equipos de peritos”. Asimismo el actual integrante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos rechazó las imputaciones que le adjudican ser “abolicionista”, y dijo que “el garantismo son, como dice la palabra, garantías para asegurar una serie de cosas: que no vamos a tener presos políticos, que no va a pasar lo que pasó con el estudiante en Jujuy, que no vamos a tener un vigilante abajo de la cama. El argumento que el garantismo es solo para los delincuentes no es cierto: las garantías son para todos”. Agregó que “yo no inventé las garantías; las garantías están en la Constitución, en tratados internacionales, en las leyes. Si alguien asume un papel en contra de las garantías de nuestra constitución que lo diga”. Respecto del papel del juez Carlos Rossi, que dispuso la libertad de Sebastián Wagner, evitó definirse basado solo en versiones periodísticas. “Lo único que sé es que hay un hueco legal gracias a Sergio Massa: si hubiésemos aprobado el anteproyecto esto hubiese sido legal o ilegal, no hubiese habido grises”.