A
vanza en las provincias el proceso en pos del aval de las legislaturas al amplio pacto de Consenso Fiscal, sellado hace poco menos de dos semanas por Mauricio Macri con los gobernadores. Se trata de un paso obligado para activar la vigencia del entendimiento, que incluye -por caso- estrictas obligaciones de control del gasto y de reducción impositiva, pero también beneficios en materia de compensaciones financieras para los distritos. Y, en un dato no menor, determina tijeretazos de recursos por no adherir. Pero para dar el paso parlamentario provincial primero es necesario que el Pacto Fiscal sea aprobado en el Congreso. Entre los distritos con el pie en el acelerador se encuentra Córdoba, donde la adhesión avanzará este miércoles en la unicameral Legislatura de manera indirecta, ya que recibirá aprobación en primera lectura el plan de gastos 2018 del peronista Juan Schiaretti. En Neuquén, en tanto, el mandatario neuquino Omar Gutiérrez (MPN) ya remitió a la Legislatura el proyecto que avala el acuerdo fiscal, mientras se dispone a negociar este martes con la Casa Rosada la marcha atrás de un nuevo tributo sobre la emisión de dióxido de carbono que amenaza con complicar las inversiones en Vaca Muerta. Por su parte, en Salta, el justicialista Juan Manuel Urtubey se reunió en las últimas horas con su gabinete económico para avanzar en la adhesión de su distrito al entendimiento. El texto será enviado esta semana a la Legislatura. En Entre Ríos, en tanto, el gobernador Gustavo Bordet no tendría problemas con que el pacto sea aprobado por la Legislatura. La Liga de Intendentes del PJ ya le dio su respaldo al acuerdo este lunes. Tampoco se han escuchado voces en contra en Diputados y el Senado. Mientras, Cambiemos sumaría su voto al pacto promovido por el presidente.