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uchas de las familias que pensaron que podrían proteger su hogar, y que festejaron la unanimidad que votó la Ley de Vivienda Única, se estarán preguntando cómo es que todavía no se hizo efectivo este proyecto de ley que tanto eco tuvo en todos los medios provinciales.La promulgación y publicación de las leyes es responsabilidad del Poder Ejecutivo, pero la tarea está pendiente desde hace más de tres meses y esta dilatación actúa en detrimento de muchísimas familias entrerrianas. En efecto, el espíritu de la ley se funda en proteger bienes indispensables que una familia debe tener para vivir dignamente, pero dado que no es sino a partir de su aparición en el Boletín Oficial que la Ley entra en vigencia, todavía muchos están en la dura espera.
La importancia de resguardar la vivienda única no debería pasar a segundo plano por los intereses de campaña, que ni en aquél momento ni en este, fueron los que movilizaron al autor de esta iniciativa. Muy por el contrario, lo anima la certeza de que miles de familias entrerrianas siguen pasando penurias y que, a veces sólo hace falta un poco de voluntad política para que se éstas se atenúen.