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or Yanina Kinigsberg de la redacción de ClarínVolver de viaje y encontrar en casa una multa por una supuesta infracción en alguna ruta del país, captada por un radar, se está volviendo una escena repetida.
Hay más de una decena de localidades que instalaron el sistema de multas fotográficas. Las quejas se producen porque muchas de esas comunas no tienen el poder para hacer multas, los montos que imponen son muy altos o los radares no están habilitados.
Hace un tiempo, Roberto Campos fue invitado a un casamiento en la ciudad entrerriana de Concordia. Decidió ir en auto y, a la vuelta, se encontró con una multa por exceso de velocidad. La foto era del radar de Villa Paranacito. A Luis Morales le pasó algo similar. Viajó a Entre Ríos y al regresar supo que debía pagar, por una supuesta infracción, casi 400 pesos a la Municipalidad de Ubajay. Estas dos comunas no tienen facultades legales para aplicar multas de tránsito, según los funcionarios consultados.
El organismo encargado de habilitar los radares es la Secretaría de la Competencia, Desregulación y Defensa del Consumidor. "Sólo hay aprobados 13 radares con instalación fija y 4 portátiles", informó Carlos Plana, director nacional de Desregulación Económica. Luego, la responsabilidad de controlar los radares es de las provincias. "En Entre Ríos no hay radares fijos aprobados pero podrían operar radares portátiles aprobados o no", señaló Plana.
En la Defensoría porteña confirman que en Entre Ríos, la legislación provincial no delega en las comunas la aplicación de multas.
La Dirección Nacional de Vialidad también suma críticas. "Faltan controles. Además, en algunas rutas, por ejemplo de Entre Ríos, bajan la velocidad máxima a 60 km/h sin justificativo ni aviso previo y, como no se puede disminuir de golpe, siempre estás en infracción", explicó Manuel Keumurdji, jefe de Asuntos Jurídicos de Vialidad. Y recomendó a los concesionarios sacar esos cambios de velocidad, que son peligrosos. "Es evidente el abuso de autoridad para beneficio económico", opinó.
La homologación técnica de los radares la realiza el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). "Homologamos 12 modelos de radares y calibramos unos 50 equipos", detalló Héctor Laiz, del INTI. Según el especialista, un radar no controlado puede tener "errores en la medición de la velocidad".
Al margen de las críticas, una multa labrada por una comuna que no tiene poder para hacerlo o una infracción tomada por un radar no homologado no tiene validez. Por eso, antes de pagar hay que revisar el remitente.