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Debemos sí, seguir de cerca su labor, de manera de ejercer nuestro rol de “fiscalizadores” y no oscurecer aún más esta confusa investigación”, reza una declaración emitida ayer por el bloque de diputados del Nuevo Espacio Entrerriano.

Los legisladores de la segunda minoría consideran que la trágica oportunidad resulta “propicia para los especuladores políticos”.

También guardan distancia de planteos formulados desde la oposición, como el de la diputada Lucy Grimalt. “Se podría pedir la cabeza de uno u otro funcionario, pero ello no devolverá la vida del principal testigo, que resultaba ser el único punto de contacto con la posibilidad de esclarecer el camino hacia Fernanda. Tal vez haya argumentos para pedir esas renuncias, pero ello no solucionará el caos instalado”, indican.

Luego arriesgan que dicho “caos” quizá sea el producto de una “escena del crimen montado sobre un terreno mediático en la urgencia por responder de la manera que sea y sin medir consecuencias el reclamo doloroso de todo un pueblo. Pero no hay que confundir a la ciudadanía: porque no es el pueblo el que pide ese “como sea”; pide la verdad. Pide a Fernanda. Y como dijeron sus compañeras en la pancarta con que recorrieron las calles de su vecindario: pide Honrar la Vida”.

“Necesitamos a Fernanda. Y necesitamos saber qué pasó con la vida de una persona que también padeció una condena pública claramente inducida y a la que le fue vulnerado el derecho de presunción de inocencia en una actitud claramente atentatoria a las libertades que defiende la vida en democracia”, diferencian.

“Luego, llegará la hora de que los verdaderos responsables de generar esta angustia ciudadana deban dar cuenta de sus actos. Queremos a Fernanda. Queremos la verdad sobre Lencina”, concluyen los diputados del Nuevo Espacio.