E
staba ingresando al edificio, en un vehículo Gol color plateado cuando fue interceptado y detenido por personal de la delegación Paraná de la Policía Federal, según informó La Voz.El empresario buscado por Interpol residía en el piso 12 del paqueto edificio céntrico de Paraná, donde también viven conocidos profesionales, políticos y empresarios.
Carmona, vivía junto a su mujer y un hijo y en esta última etapa de la fuga en Paraná, había desmejorado su salud, incluso se estaba haciendo un tratamiento médico contra la hipertensión y deabetis.
Cabe consignar que a los vecinos, nunca les permitió ingresar a su piso. El mayor paquete de operaciones financieras, la mantenía a través del Banco Río, informaron judiciales.
Carmona denunciado en Paraguay por corrupción y estafa millonaria en dólares, había sido declarado rebelde y prófugo por la justicia guaraní al haberse fugado del país en 1999.
Ante esta situación, la justicia guaraní ordenó a la Policía Internacional (Interpol), la captura internacional contra el empresario dedicado en la capital entrerriana a algunos negocios empresariales y la construcción de torres céntricas como la de calle Cervantes en Paraná.
Carmona fue denunciado en Paraguay por el vaciamiento del Banco Nacional de Trabajadores (BNT), pero el problema mayor es que el empresario formó parte de una asociación ilícita junto a reconocidos políticos, ex gobernantes y ex funcionarios de gestiones anteriores en el vecino país, además de empresarios poderosos.
La información oficial de la Oficina de Delitos Económicos de la Fiscalía Nacional de Investigaciones Paraguaya, resalta que Carmona organizó cinco emprendimientos que sirvieron de pantalla para vaciar el Banco Nacional de Trabajadores. Entre ellos la ruta denominada V, el cementerio Jardín de la Paz - Las Acacias, el edificio Coomecipar II, las viviendas de Mariano Roque Alonso y la reparación del Hotel Guaraní.
La Justicia de Paraguay, también responsabilizó de los ilícitos a Emilio Rolando Villar y el ex presidente paraguayo Juan Carlos Wasmosy. En definitiva, se estableció en estas operaciones fraudulentas, el desvío ilegal de 16 millones de dólares.
La investigación, derivó en responsabilizar por los hechos a un empresario identificado como Horacio Zelaschi quién fue condenado a 10 años de cárcel, pero cuando iba a ser detenido, escapó del país".
El dinero "inmolado" terminó perjudicando al Instituto de Previsión Social que presta el servicio de salud y jubilación a los trabajadores guaraníes y el BNT.