A

Según Jorge Kerz, Defensor del Pueblo, del análisis se desprende que el enfoque de las políticas sociales es de una dispersión muy amplia, donde se invierten grandes sumas de dinero y sin que se alcancen a producir modificaciones de envergadura. También se hace difícil conocer el monto total invertido y los impactos generales alcanzados.

Esta dispersión de enfoques, lleva también a que el potencial beneficiario necesite poseer un grado de experiencia y conocimiento bastante detallado de las alternativas existentes para poder tener facilidad de acceso a algún plan de carácter social.

Existen no pocos casos en que, por desconocimiento, no se accede. Un claro ejemplo es el de familias indigentes que no tienen acceso a alguna de las modalidades existentes y donde muchas veces tienen sólo expectativas de acceso a un bolsón de comida.

Por otra parte, debido a esta dispersión, tampoco existen posibilidades de analizar o comprender cabalmente los impactos de los Programas, ya que es difícil conocer las necesidades existentes, y la totalidad de recursos posibles, lo que lleva generalmente a que, lo recibido como asistencia por cada familia en situación de vulnerabilidad, sea escaso como para establecer mejores condiciones de vida.

Por otra parte afirmó el Defensor del Pueblo que la mayoría de los controles se establecen generalmente desde el punto de vista de los individuos beneficiarios y no sobre los efectos de los planes.

Otro de los inconvenientes graves es que, en muchos de los planes de carácter social existentes (empleo, comedores, emprendimientos), aparece como condición de acceso al mismo la presentación de un proyecto, lo que significa que el potencial beneficiario debe cumplimentar el llenado de varias hojas y formularios de a veces dificultosa elaboración.

Esta dificultad se agrava cuando el potencial beneficiario es un ciudadano que hace años que se encuentra desocupado o inmerso en la indigencia, con la consecuente pérdida de competencias laborales. Los requerimientos para el acceso llevan muchas veces al desaliento.

Por otro lado, el objetivo declarado de algunos de los planes de carácter social es la búsqueda de proyectos productivos y el restablecimiento de la cultura del trabajo, aunque, si se tiene en cuenta lo acontecido en nuestra sociedad, es necesario considerar que en la mayoría de los casos el logro de esos objetivos no puede ser alcanzado por el ciudadano de manera individual (mediante un proyecto productivo) sino que la inversión social del Estado debería ser integral (dinero, formación, actualización de competencias laborales,etc.). No desde el punto de vista de cada individuo sino como políticas generales (educati-vas y de actualización laboral). Para el Defensor este es un tópico de problemas que debe ser encarado con responsabilidad, seriedad y de manera integradora.

El Defensor, en el marco del Informe Anual de la Defensoría del Pueblo ante el Honorable Concejo Deliberante manifestó que "teniendo en cuenta estas realidades, se hace perentorio la unificación y coordinación de esfuerzos y recursos para que, con una orientación a la familia en condición de vulnerabilidad (pobreza e indigencia), pueda llegar la mayor cantidad posible de recursos existentes para mejorar las condiciones de vida extrema-mente difíciles, al tiempo que las demás políticas generales (educación y formación) alcancen a producir cambios. La pobreza no es una cuestión individual de la que cada ciudadano puede salir gracias a un proyecto productivo, sino que la pobreza y la exclusión son CUESTIONES SOCIALES, que deben atacarse desde un punto de vista social, teniendo en cuenta que los logros se obtienen también a mediano plazo".

Desde la Defensoría del Pueblo de Paraná, entendiendo que esta problemática exce-de los límites locales y las posibilidades del Municipio, se promovió que todos los Defensores del Pueblo en Argentina traten este tema en una reunión plenaria para promover una Recomendación de carácter nacional. Este encuentro debería acontecer, según la agenda de la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina (ADPRA), antes de que finalice el año en curso.