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los pocos minutos, los postores comenzaron a subir la oferta, pero hubo uno de ellos que, al grito de “quien da más” levanto su voz y ofertó 1,7 millones de pesos y tras los tres intentos que hizo Putallaz para superar esa cifra, el martillo se bajó, finalmente, para el empresario Marcelo Edmundo Hoffmann, de la localidad de Ramírez.El postor, titular de la firma Marcelo Edmundo Hoffmann e hijos S.A., tiene previsto reabrir el frigorífico, que perteneció a la firma Vizental, en la localidad y que hace más de 20 años está paralizado.
De esta manera, se cierra una nueva etapa del largo proceso pedido como concurso preventivo, hoy quiebra, de la firma Vizental; aunque todavía quedan pendientes, por falta de postores, las subastas de dos plantas más, una en General Pico, La Pampa, y otra en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires.
Por el valor de 1,7 millones de pesos, Hoffmann adquirió un predio de 9.765 metros cuadrados de los cuales están cubiertos 5.072 metros cuadrados. Además, de los caminos y las playas de maniobra de hormigón armado con un total de 1.704 metros, según se había establecido en el edicto.
Cumplimentados los trámites de rigor, Hoffmann adelantó, que tiene previsto poner en marcha un nuevo proyecto productivo-industrial en la localidad, para lo cual tiene previsto realizar una inversión que superará los 3 millones de pesos.
La empresa de Hoffmann abrió sus puertas en Ramírez en 1965. Por aquellos años, su actividad como contratista rural comenzó con una sola cosechadora, pero luego se fueron anexando equipos de apoyo como tractores, sembradoras, camiones, acoplados, silos, secadoras de grano portátiles.
El negocio, para la familia integrada por el matrimonio y cinco hijos, marchaba bien —según comentó Hoffmann— hasta que en 1980, se decidió industrializar lo producido en el campo, para lo cual se le compró a la firma Vizental la planta donde se producían alimentos balanceados. Cinco años después, en el predio de 42 hectáreas, se inauguró la industria con una capacidad de producción de 4.000 toneladas mensuales.
La firma de Ramírez, también cuenta con una flota de camiones para el transporte de carga, estaciones de servicios y cría de aves y conejos para exportación. En la empresa trabajan más de 100 personas.
“Tenemos muchos proyectos, pero lo fundamental es generar fuentes de trabajo en mi ciudad. Como idea, se piensa en la reapertura del frigorífico, tanto para la faena de vacunos, como aves y conejos, para lo cual estamos en trámites por una audiencia con los funcionarios del Senasa”, comentó el empresario. Fuente: El Diario EL PROCESO. Hasta que no se rematen las dos propiedades que quedan, una en General Pico, La Pampa y la otra en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires, no se pueden liquidar los bienes a los acreedores de Vizental. La causa, caratulada “Vizental y Cia Sacia, su pedido de concurso preventivo —hoy quiebra—” se encuentra a cargo del juez de primera Instancia en lo Civil y Comercial Nº 1 de Colón, Jorge Raúl Malgor, quien decretó el remate de las plantas frigoríficas.