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or Marcos V. Hawardt, desde Capital Federal para Informe Digital
A principios de 1982 se estipuló que las naves podían tener una eslora máxima de 225 metros y en 2000 se autorizó una ampliación a 230 que incluyó también la posibilidad de realizarse pruebas para barcos de hasta un 5% más largos, es decir de 241,5 metros.
Distintos estudios encargados por entidades públicas y privadas del país aseguran, sin embargo, que buques aún más grandes pueden navegar sin peligro por el Paraná. Pero el límite se mantiene infranqueable y las naves de la compañía CP Ships, de 243,35 metros, no pueden amarrar en Terminal Zárate (TZ), lo cual pone en riesgo la continuidad del puerto inaugurado en noviembre de 2001. Y en la misma situación podrían quedar el racimo de terminales situadas en el área Zárate-Campana.
Pruebas técnicas
Simulaciones, análisis, pruebas y estudios encargados por la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, el concesionario Hidrovía SA, la Prefectura Naval y la Cámara de Puertos Privados Comerciales garantizan la segura navegación por el Paraná de buques de hasta 270 metros de eslora.
Entre junio y julio de 2003, la Port and Maritime Consultants BV de Holanda llevó a cabo distintas simulaciones en el sistema de computación “Toolbox” para buques graneleros de hasta 270 metros y portacontenedores de 265 metros, representando las tres principales curvas del Paraná de las Palmas con resultados satisfactorios. Algunos días después, del 8 al 12 de septiembre, el instituto holandés Marin de Wageningen realizó simulaciones a las que asistieron nueve prácticos del Paraná bajo supervisión de representantes de Prefectura Naval y de Hidrografía Naval. Efectuaron varios recorridos con portacontenedores en la vuelta del Este, en el Paraná de las Palmas, que dieron buenos resultados para buques de hasta 265 metros de eslora.
Por cuenta de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, el Departamento de Ingeniería Naval de la Universidad de Buenos Aires efectuó un análisis comparativo de la energía disipada por cinco embarcaciones típicas en la misma vuelta del Este, del cual se desprende que los portacontenedores de 243,3 y 265 metros de eslora tienen similar o inclusive menor incidencia que los graneleros que navegan actualmente el río.
Ayer sí, hoy no
El último antecedente es el del 17 de julio, cuando personal técnico de la Policía de Seguridad de la Navegación, dependiente de la Prefectura Naval, emitió un informe favorable en función de los resultados que arrojó la navegación del buque TMM Colima de CP Ships desde Rada la Plata hasta el puerto del Grupo Murchison.
El 10 de agosto Prefectura autorizó la navegación hasta Terminal Zárate de buques similares al Colima pero poco después de un mes, el 15 de octubre, emitió una disposición desautorizando la operación. Es así como el “TMM Guanajuato”, también de CP Ships, debió cambiar sobre la marcha su puerto de destino y atracar en la terminal 5 de Puerto Nuevo.
