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os internos de los pabellones 1 y 2 de la U.P.Nº 3, piden “un mejor trato por parte del servicio penitenciario hacia nuestras familias ya que hace tiempo atrás venimos padeciendo el maltrato a nuestros familiares que nos visitan”. También exigen “que se cambie el médico de cabecera del servicio penitenciario, César Voscoboinik porque no da la atención médica adecuada, ya que en varias oportunidades se le han hecho denuncias por parte de la mayoría de los internos y nunca hemos notado un cambio, todas las denuncias fueron en vano ya que el servicio no ha tomado ninguna medida sobre estos casos”.

Asimismo, quieren que se les “faciliten dos termo tanques ya que estamos en época de frío y hasta la fecha nos venimos duchando con agua fría”.

A paso seguido, reclaman que “se haga un estudio psiquiátrico y criminológico a los internos dado que el gabinete de dicho penal, asistente social Faviola S. , Martín Fernández, el Dr. Sergio Brodsky, el psiquiatra Dr. Villalba y el terapeuta Belén no se encuentran competentes ni capacitados como para hacer un estudio criminológico a los internos”.

“También les solicitamos que por intermedio de un funcionario de servicio penitenciario o dirección general se nos otorgue un teléfono dentro del pabellón ya que es un beneficio que se nos ha quitado por parte de la intervención y cada vez estamos más incomunicados con nuestros seres queridos”, indica un comunicado distribuído a la prensa.

El escrito hace saber que “ya hace bastante tiempo que no nos entregan elementos de higiene y de cama, sábana, frazada, colchones etc., etc., etc.” Piden que “aquel interno que tiene problemas familiares, a quien no lo puede venir a visitar un familiar, se le otorgue urgentemente bajo la ley y el C. P. 24660 que sea derivado hacia su domicilio como lo dice en el C.P., no nos pueden cortar el vínculo familia”.

Entre la lista de solicitudes, incluyern además que “se reintegren los talleres de carpintería, herrería, bloquería, escobería y que se incorpore la panadería, dentro del penal para así poder trabajar los internos de este lugar” y “tener contacto con los Derechos Humanos ya que hace mucho tiempo no se hacen presentes para nuestra reinserción social”.

Por último los reos pretenden “que se nos solucione el problema que venimos padeciendo hace un tiempo atrás con los teléfonos públicos que se encuentran dentro de los pabellones ya que es el único medio de estar en contacto con nuestro vínculo familiar”.