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Los reclusos están reclamando agilización de las causas; un mejor trato por parte del servicio penitenciario hacia sus familias; el cambio del médico de cabecera; que les faciliten dos termo tanques y que les realicen un estudio psiquiátrico y criminológico.

Según informó Faure, aunque Carballo concurrió a la Unidad Penal a dialogar con los internos e “ingresó dos veces al penal y les explicó caso por caso qué es lo que está al alcance y qué es imposible”, “ellos dijeron que lo van a evaluar y para mañana recién van dar una respuesta, pero hasta ahora mantienen la postura”.

Justamente, el funcionario “se comprometió a enviar frazadas, colchones, sábanas, todo lo que concierne al presupuesto de él”, así como a realizar gestiones ante la Justicia “para apurar las causas de aquellos internos que estén atrasadas”, especificó Faure, quien reiteró: “Esto no los conformó Y ellos van a mantener la huelga hasta tanto vean si se les da algún beneficio”.

Finalmente, Faure reconoció que si bien la huelga de hambre se está instrumentando en forma totalmente pacífica, tiene preocupación por algún rebrote de violencia. “Esto es latente se sabe como empieza pero nunca como termina”, manifestó, al tiempo que acotó: “Mientras sea pacífico yo creo que a corto plazo vamos a llegar a un entendimiento”. (Diario Junio)