L
a falta de control y la demora en la puesta en marcha del plan tecnológico para el tratamiento de residuos sólidos domiciliarios, encendió la discusión en San Salvador entre el Ejecutivo y el Concejo Deliberante.
El disparador fue la gran acumulación de tachos de productos tóxicos, principalmente agroquímicos que se utilizan para la fumigación, que son arrojados al basural municipal sin ningún tratamiento para evitar la contaminación.
En ese predio son arrojados cientos de kilos de basura urbana y química sin clasificación, lo que pone en riesgo no sólo a las numerosas familias que subsisten del cirujeo día a día sino de toda la población, según se advirtió desde el bloque opositor de concejales de la Unión Cívica Radical (UCR), a través de una resolución.
Si bien no hay estudios científicos que así lo determinen, no se descarta que el uso indiscriminado de químicos, pueda ser uno de los causantes de enfermedades cancerígenas.
Sobre este punto, los ediles Hugo González, Martín Gerard y Armando Ibarra, en su pedido manifestaron su preocupación “por el notable crecimiento de los casos de cáncer detectados en los últimos años en la población de San Salvador”.
“El estado del basural municipal es deplorable”, indicaron los concejales y requirieron al Municipio que defina en forma “urgente” un plan estratégico.
“La situación no es nueva, pero en San Salvador se agudiza por el notable crecimiento de los casos de cáncer detectados y las sospechas están orientadas al uso excesivo y descontrolado de los productos químicos utilizados en la producción agropecuaria, máxime en una zona fértil en producción de arroz y soja”, se indicó en el escrito.
Asimismo, se acusó al Municipio de “no demostrar interés en indagar” sobre el crecimiento de la enfermedad en la ciudad.
El escrito no pasó inadvertido y como contrapartida desde la Municipalidad se acusó a los opositores de “querer malograr el gobierno manipulando a la opinión pública”.
En ese sentido, el intendente Víctor Hugo Vilhem, a través de una carta que tituló “A mis vecinos”, no sólo criticó a los ediles radicales sino que a modo de contradenuncia dijo que González fue uno de los responsables y “partícipe necesario del aniquilamiento de la planta de reciclado (...) Era una planta modelo en la provincia y, del que sólo quedan, como testigos mudos de una época de destrucción y barbarie, tres postes de hormigón del cerco perimetral y los postes que sostenían el portón, que ya no existe” en la ciudad, por decisión de la gestión anterior.
“Evidentemente hay gente que se ve en la necesidad de decir y de hacer cualquier cosa, inclusive la de padecer amnesia”, enfatizó Vilhem en su carta dirigida a los vecinos, pero que en realidad plantea una serie de interrogantes para los tres concejales por su responsabilidad u omisión durante la gestión anterior, entre ellas, que no exista la planta de reciclado. “¿Dónde están los causantes de tanto daño al pueblo de San Salvador?” y les aconsejó que “desistan de la idea de volver (a ser Gobierno), porque “el pueblo no olvida, ya no perdona”.
“Me causa realmente tristeza ver la falta de humildad de algunos dirigentes políticos. Quisiera ver asumir errores, responsabilidades, pero la soberbia y la desmesura parecen imponerse”, indicó el jefe comunal, al tiempo que aseguró que su compromiso “es la recuperación de la planta de reciclado de residuos, para lo cual estamos trabajando”.
En ese sentido, Gerard arrojó el guante en la pelea, e ironizó que el Municipio debe “declararse en emergencia de ideas, no financieras como lo hizo”.
La crítica se centra en que hace nueve meses, según se indicó desde el bloque radical, el Municipio anunció el plan tecnológico de tratamiento de residuos, para lo cual destinó 2.400 pesos para la elaboración de un proyecto, “pero no se hizo nada”.