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os padres de tres jóvenes de entre 18 a 19 años denunciaron en la comisaría primera que un grupo de entre ocho y 10 muchachos agredieron violentamente a sus hijos el domingo 25 a la madrugada en la zona del Rosedal. Los denunciantes identificaron a los supuestos agresores; las fuentes dejaron trascender que se trataría de jugadores de rugby de una prestigiosa entidad paranaense y alumnos de un colegio céntrico religioso.En la seccional de calle Tucumán se realizaron las primeras medidas con conocimiento del juez de Instrucción Eduardo Ruhl. De este modo se les tomó declaración a los jóvenes agredidos, entre los que se encuentra una mujer.
Según lo informado a las autoridades policiales, en la madrugada del domingo 25 “los rugbiers los tomaron por sorpresa y comenzaron a golpearlos de una manera increíble por un motivo desconocido”.
Ofuscados, los familiares recordaron en la comisaría que en el pasado reciente (año 2001) un grupo de rugbiers fue denunciado y condenado por un hecho de similares características. Pero además marcaron en la presentación que otro grupo de jugadores del mismo deporte fueron acusados por una supuesta violación producida a dos prostitutas de Paraná. Se especula con que esta causa tenga destino de archivo.
El médico policial constató que las lesiones de los jóvenes fueron leves. Así y todo los magullones, golpes y escoriaciones eran visibles en sus rostros y otras partes del cuerpo.
Relato de los denunciantes
Las víctimas del ataque aseguraron que estaban en el Rosedal –en la zona de Mitre y Catamarca– disfrutando de la noche cuando aparecieron en el lugar un grupo de entre ocho a 10 muchachos que los agredieron sin causa aparente.
En la denuncia se individualizó a un joven de 19 años y a otro compañero apodado El Pato. Entre los datos aportados por las víctimas, se hizo saber que los agresores son además alumnos y ex alumnos de un colegio religioso céntrico de la ciudad.
La investigación determinará que en las próximas horas los menores denunciados con nombre y apellido sean convocados para la declaración correspondiente.
Los familiares dejaron aclarado que hay varios testigos que se comprometieron a brindar datos que permitan confirmar la existencia del hecho y establecer la irracionalidad con la que actuaron los “ebrios jugadores” de la entidad paranaense. De acudir a declarar quienes vieron los hechos, el magistrado tendrá elementos suficientes para llevar adelante el proceso.
En la declaración se hizo mención que uno de los menores golpeados fue arrastrado y sus ropas rasgadas. Previo a esto, los empujaron y “tiraron al piso para luego patearlos, trompearlos y escupirlos sin sentido”. Los menores padecieron golpes y dolores y una crisis nerviosa porque nunca pudieron defenderse, además del ensagrentamiento facial, nasal y bucal. (Diario UNO)