E
n las próximas horas, el presidente Néstor Kirchner anunciará al sucesor del desplazado jefe de la Fuerza Aérea, Carlos Rohde, por el escándoloso episodio del tráfico de cocaína en Ezeiza.Tras una reunión que se prolongó más allá de la medianoche, el Presidente ordenó a su ministro de Defensa remover no sólo a Rohde sino también a otros 11 brigadieres, lo que significó un descabezamiento mayor al que sufriera el Ejército hace dos años.
Kirchner resolvió los cambios luego de escuchar un informe acerca del escandaloso contrabando de 60 kilogramos de cocaína a través de la empresa aérea Southern Winds.
Kirchner también estudia la disolución de la Policía Aeronáutica (PAN) creada en 1977, la cual sería reemplazada en sus funciones por la Policía Federal o la Gendarmería. La medida supone devolver a un organismo civil la custodia de la seguridad aeroportuaria.
La decisión de expulsar al brigadier Rohde se tomó luego de que se comprobara que ocultó la información del caso al ministro de Defensa, José Pampuro, que se enteró de lo sucedido por partes de inteligencia.
Rohde conocía los sucesos desde septiembre pero jamás informó nada y a su vez respaldó al comodoro Alberto Edgardo Beltrame, padre del entonces prófugo empleado de Southern Winds Walter Beltrame, al frente de Ezeiza
El escándalo del contrabando de drogas, que desembocó en la intervención de la PAN, el desplazamiento de su titular y la designación de un civil (el viceministro de Defensa Jaime Garreta) por el término de 45 días, enojó al Presidente porque, entre otras cosas, no reportaron a la superioridad de Defensa las irregularidades.
El episodio salpica a la empresa Southern Winds, a la PAN y a la Fuerza Aérea porque el principal sospechoso para la Justicia es el capturado Walter Beltrame, hijo del ex jefe de Ezeiza el comodoro Alberto Beltrame, quien ya fue desplazado de su cargo.