A
l acto de asunción de Zamora asistieron el ministro del Interior, Aníbal Fernández, el ex presidente Raúl Alfonsín y el actual titular de la UCR, Ángel Rozas, en una muestra de la importancia que le otorga el radicalismo a la recuperación de una provincia históricamente peronista.Zamora, hasta ahora intendente de la capital santiagueña, logró el pasado 27 de febrero derrotar en las urnas al candidato peronista José Figueroa, que fue apoyado por el Gobierno de Néstor Kirchner.
El último gobernador radical había sido Benjamín Zavalía, quien ganó las elecciones de 1963, las mismas que a nivel nacional se adjudicó Arturo Illia en un comicio donde estuvo proscripto el peronismo.
Zamora asumió la magistratura provincial en medio de una crisis social importante, con la Justicia paralizada desde hace cuatro semanas por designaciones irregulares, y los docentes en alerta por la falta de solución a sus reclamos salariales.
La asunción de Zamora significó el final de la intervención, que con Lanusse a la cabeza había cerrado el ciclo del Gobierno juarista, primero a cargo del caudillo Carlos Juárez y más tarde de su esposa Mercedes `Nina´ Aragonés.
Juárez y su esposa fueron liberados por la Justicia -que los mantenía con prisión domiciliaria en varias causas- el lunes posterior a las elecciones, en un hecho por el cual Zamora apuntó contra la intervención federal.
En este escenario, para el acto de asunción de Zamora y el vicegobernador Emilio Rached también llegó a Santiago el secretario de Provincias, Rafael Follonier.
La expectativa creada por el cambio institucional quedó demostrada con los tres escenarios que fueron montados frente a la Casa de Gobierno, en la Plaza San Martín, donde se realizaron -además del acto principal- espectáculos musicales y un show de luces y fuegos artificiales.
Como invitados especiales estuvieron el gobernador de Mendoza, Julio César Cobos; el de Tierra del Fuego, Jorge Colazo; y el mandatario de Salta, Juan Carlos Romero; además del vice de Chaco, Eduardo Moro.
Antes de la asunción y la jura, el binomio electo Zamora-Rached concurrió a la Catedral de Santiago, donde se ofició una misa por el recambio institucional.
Luego Zamora concurrió a la Cámara de Diputados, donde realizó un discurso ante los 49 nuevos legisladores, también electos el pasado 27 de febrero y que asumieron el martes en sus cargos, en medio de una sesión escandalosa.
Esto sucedió por el retiro de un grupo de diputados del PJ cuando los seguidores del dirigente provincial José Cantos abrieron la herida de la interna peronista al anunciar un nuevo bloque denominado "Lealtad Popular".
Los dirigentes que responden a Figueroa, ganador de la interna previa a las elecciones, acusaron a Cantos de tener "un acuerdo" con Zamora patra evitar que gane el PJ en la Legislatura.
En este marco, a última hora del martes el gobernador Zamora terminó de confirmar su Gabinete, mientras que en la víspera también asumieron los integrantes del Tribunal Superior de Justicia.