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Alsogaray, nacido el 22 de junio de 1913, fue el principal impulsor del liberalismo económico en el país. Se edificó claramente como referente del sector cuando fue funcionario de la Revolución Libertadora, el gobierno de facto que derrocó al peronismo en 1955.

También fue ministro de Economía en la presidencia de Frondizi, cuando pronunció su frase más recordada: “Hay que pasar el invierno”. Más tarde fue jefe también del Palacio de Hacienda durante el breve mandato de Guido y embajador en EE.UU. durante la dictadura de Onganía.

Durante los 80 creó la UCeDé, el partido de centroderecha que llegó a ubicarse como tercera fuerza en las elecciones presidenciales del 89 -antes de su acercamiento al menemismo- y se constituyó como una opción fuerte sobre todo en Capital Federal.

Con los años, dentro del partido apareció con fuerza la figura de su hija, María Julia, que terminó transformándose en una figura muy cercana al gobierno menemista y fue una funcionaria clave del régimen. Alsogaray estuvo apartado en los últimos tiempos de la actividad política, mientras su partido histórico, la Unión de Centro Democrático, realiza esfuerzos por resurgir como movimiento independiente.