E

Durante el acto, llevado a cabo en Casa de Gobierno, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, afirmó que el gasoducto "va a llevar beneficios industriales, calidad de vida y se va a complementar con los gasoductos planificados para hacer en Catamarca y La Rioja", además de los troncales cuyos fideicomisos se están finalizando.

Según dijo, se sumarán siete millones de metros cúbicos al final del invierno de 2006, que se complementan con los cinco millones inyectados durante 2005, y con otros siete millones que serán incorporados en 2007 y 2008.

La obra demandará una inversión de 18 millones de pesos y la carta de intención prevé que se constituya la primera etapa de gasificación de la Puna Jujeña y el Sur de Bolivia mediante la construcción de un ducto de 95 kilómetros de extensión, que arrancará en el Gasoducto de la Transportista Norandino, en el paraje Miraflores, y en paralelo a las rutas nacionales 9 y40, hasta llegar a la ciudad fronteriza de La Quiaca.

De Vido señaló que los gasoductos permitirán garantizar al sector industrial "toda la energía al precio que la industria argentina necesita para tener su correspondiente promoción, inserción en el mundo y competitividad".

En cuando a las obras del hospital "Héctor Quintana", por un valor de más de 50 millones de pesos, De Vido explicó que la Nación asumirá como propio un crédito de España, que había sido solicitado oportunamente por el gobierno jujeño.