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a ley de biocombustibles había surgido de un proyecto del Poder Ejecutivo Nacional (PEN), inicialmente aprobado por los senadores, tras lo cual recibió una serie de cambios impulsados por la Comisión de Energía y Combustibles de la Cámara de Diputados tendientes a dar mayor participación a las pymes, sobre todo el sector agrícola.El diputado kirchnerista mendocino Alfredo Fernández, vicepresidente de dicha Comisión, expresó su satisfacción por la aprobación de la ley por parte de los senadores, quienes agregaron a último momento el artículo decimoséptimo por el cual se incorpora lo relacionado con el "Procolo de Kyoto" y los "Bonos de Carbono".
Fernández indicó que si bien ello era innecesario ya que existe una ley específica al respecto, por lo cual no se hace necesario que ahora lo vuelva a considerar la cámara baja, "lo que abunda no daña".
La ley de biocumbustibles, además de sus beneficios ecológicos constituye una importante alternativa al uso de los hidrocarburos cuyos precios vienen creciendo aceleradamente, a la par de ayuda a paliar las decrecientes reservas argentinas y mundiales en la materia.
Asimismo constituye una perspectiva de importancia para el desarrollo de las economías regionales donde se puedan realizar plantaciones para producir alcoholes a mezclar con las naftas y aceites para hacerlo con el gasoil.
Por su parte la Cámara de Diputados decidió cubrir el cargo de vicepresidente tercero, para lo cual inicialmente estaba previsto hacerlo con el anterior titular del cuerpo, el duhaldista ex intendente de Quilmes Eduardo Camaño, pero en un cambio de último momento se optó por la justicialista bonaerense Graciela Camaño, del partido de San Martín.
A continuación, y virtualmente sin debate ante el consenso existente en la materia, los diputados dieron la primera media sanción al proyecto de ley pyme que ahora deberá pasar en revisión al Senado estimándose que será aprobado, definitivamente, por la cámara alta, antes de fin de mes.