F
ue poco después de las 8 de la mañana cuando se recibieron en la sede policial de la jurisdicción de Lucas González los llamados desesperados de personas que advirtieron un accidente en el cual habían resultado involucrados cinco adolescentes.Los jóvenes, todos oriundos de Lucas González, departamento Nogoyá, viajaban en un automóvil Volkswagen Senda y cuando circulaban a unos 3 kilómetros de la ruta provincial 39, en el acceso a la ciudad, por causas que se tratan de establecer, se salieron del camino en el sector de una curva y tras recorrer un tramo a considerable velocidad, golpearon contra un árbol.
Fue tanta la mala suerte que el impacto de mayor importancia fue en uno de los laterales del coche, sobre una de las puertas traseras, lesionando en forma letal a dos de los ocupantes y de gravedad a otro de los muchachos.
De acuerdo a las fuentes policiales consultadas, el vehículo era conducido por un menor de 17 años, de nombre Néstor y cuyo apellido se omite por cuestiones legales, debido a su supuesta responsabilidad en el accidente. Este joven debió quedar internado en el hospital zonal de Nogoyá, sin que sus lesiones revistan gravedad.
Pero quienes llevaron la peor parte en el siniestro fueron los hermanos Diego y Nazareno Emanuel Bussato, de 14 y 17 años respectivamente, quienes lamentablemente, de acuerdo a lo informado, dejaron de existir en forma inmediata tras recibir el golpe.
Otros ocupantes del coche fueron identificados como Oscar Albino, de 18 años, y Luciano Schenfeld, de 24 años. Este último se encontraba en estado grave cuando fue trasladado al hospital.
En el lugar del accidente debieron trabajar Bomberos Voluntarios, personal sanitario del Hospital de Nogoyá y peritos de Criminalística, bajo las órdenes del juez de Instrucción de turno, quien tras realizar los trámites legales de rigor ordenó la entrega de los cuerpos de los fallecidos a sus padres para su cristiana sepultura.