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as empresas detectadas en esa situación se encuentran en las localidades de Arroyo Leyes, Los Zapallos y Santa Fe, y en todos los casos se hallaron numerosos ejemplares de especies de menor medida que la fijada por la normativa provincial.
El titular del organismo, Marcelo Terenzio, se mostró cauto en relación a los proyectos presentados en el Congreso nacional y el Concejo Municipal de Santa Fe propiciando el cierre temporario de la exportación de sábalos para revertir la depredación que se está cometiendo contra esa especie en varios ríos de la región.
El funcionario señaló que “a las decisiones de este tipo hay que tomarlas con sustento científico y buena información”, pero se mostró decidido de avanzar con mayor firmeza sobre los frigoríficos.
Estudio biológico
Asimismo, Terenzio afirmó que se van a tomar “todas las medidas que sean necesarias” sobre el tema en cuestión, y anticipó que se ha realizado un estudio biológico sobre los sábalos con la finalidad de contar con una información técnica y científica, “porque de otra manera producimos un diagnóstico sin ese rigor que nos da este tipo de estudios”.
Por otra parte, se supo que los diputados nacionales Hugo Storero y Alicia Tate presentaron un proyecto en la Cámara baja proponiendo que se suspenda por tres años la exportación de sábalos, señalando que más de 60 mil toneladas de esa y otras especies de río son comercializadas en el país, la mitad de ellos en negro, y en enormes proporciones exportadas a Brasil, Colombia, Nigeria y países europeos.
A modo de ejemplo se menciona que “Brasil también veda la pesca del sábalo en los Estados donde se encuentran los afluentes de la cuenca del Plata porque ese es su principal recurso natural, y en cambio nos compra el fruto de la depredación producida aguas abajo, es decir en aguas argentinas”.
La iniciativa presentada por los legisladores nacionales se alinea con una presentación de similares características en el Concejo Municipal de Santa Fe para que el Departamento Ejecutivo solicite al presidente de la Nación y a la Legislatura provincial que se prohíba la exportación de sábalos a raíz de la depredación ictícola que está extinguiendo de ésta y otras especies al río Paraná y los cursos de agua que integran su cuenca.
Por su parte, el concejal capitalino Eduardo Simoniello planteó que el municipio pida la suspensión por 18 meses de las exportaciones de sábalo, que podría prorrogarse, si fuera necesario, para conservar la mencionada especie. El edil explicó que su iniciativa solamente busca que el problema sea debatido con las distintas entidades interesadas y el intendente tome en sus manos el tema.
Complacencia
En la presentación también se denuncia “la existencia de complacencia entre los organismos que tienen que controlar y quienes se dedican a la exportación, porque está perfectamente comprobado que se están sacando ejemplares de hasta de 20 centímetros de longitud, que la ley de pesca prohíbe explícitamente”.
