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ampoco la Escuela Número 210 de Nivel Medio ni el Centro de Capacitación Josefina Zubizarreta, que funcionan en el mismo edificio, un establecimiento centenario, ubicado en el corazón del Parque Urquiza. La escuela se quedó sin agua el fin de semana, y ese no es un dato menor.La escuela fue violentada por desconocidos, que incendiaron una puerta, destrozaron el tanque de agua y se llevaron parte de las cañerías. Ayer, la Escuela Pueyrredón, una construcción de dos siglos atrás, tenía las puertas de hierro y hojalata enlazadas por gruesas cadenas como signo de inactividad. En el patio, un grupo de docentes mataba el tiempo en charlas de circunstancias, alejados por esas horas a prudente distancia de la tarea en las aulas, a mediamañana vacías de alumnos.
La situación generó preocupación y fueron los docentes quienes alertaron respecto del “olvido” en que está la escuela, señalaron la falta de infraestructura necesaria y de mobiliario en condiciones y las carencias que ya afectan la calidad de la enseñanza que se dicta. El robo y destrucción de las instalaciones, dijeron, “no hace más que agudizar las precarias condiciones de los edificios escolares que carecen de vigilancia”, según el diagnóstico de Mirta Alzugaray.