E
l Jefe de Guardia de Pediatría del Hospital Materno Infantil San Roque, Ubaldo Hure, explicó que “la "escabiosis" o Sarna, es una enfermedad contagiosa de la piel causada por un ácaro muy pequeño, que vive en la piel del ser humano, produciendo picazón lo que hace que la persona se rasque y se lastime provocando una lesión aun mas grave. Se presenta en la piel en forma de pequeños granos, ampollas y pequeñas úlceras con costras, donde el parásito se mete debajo de la piel”.El ácaro de la escabiosis excava la piel y deposita los huevos que maduran en 21 días. Forma un refugio que parece una línea delgada similar al trazo de un lápiz. La erupción pruriginosa es una respuesta alérgica a los ácaros.
Estos parásitos se encuentran más comúnmente en la piel de los bebés y causan granos en el tronco o pequeñas ampollas en las palmas de las manos y plantas de los pies. En los niños pequeños, las áreas que pueden resultar involucradas son la cabeza, el cuello, los hombros, las palmas de las manos y las plantas de los pies; mientras que en los niños mayores y en los adultos resultan involucrados las manos, las muñecas, los genitales y el abdomen.
El doctor Hure comentó que “pacientes con esta enfermedad vemos prácticamente durante todo el año, con algunos incrementos durante esta época, y agregó que “si bien los índices actuales no han superado a los establecidos el año pasado, se han registrados numerosos casos de familias enteras que llegan a la guardia por asistencia”.
La escabiosis se transmite por contacto directo con personas infectadas y con menos frecuencia, al usar la misma ropa o al compartir la ropa de cama. Por eso es que en ocasiones, se contagian familias enteras.
Los Síntomas mas frecuentes son:
Picazón, especialmente en la noche
Líneas delgadas en la piel similares al trazo de un lápiz
Salpullido
Abrasión de la piel por el rascado y la excavación
En cuanto al tratamiento, el doctor Hure indicó que “el objetivo consiste en eliminar la infección. Depende cada caso en particular, se recetan cremas y lociones que deben aplicarse en todo el cuerpo. En ocasiones, todos los miembros de la familia, así como también las parejas sexuales de la persona infectada, deben estar bajo tratamiento, incluso si no se presentan síntomas”.
De no tratarse a tiempo esta afección se pueden presentar complicaciones dadas por una infección secundaria de la piel por el intenso rascado.
La prevención consiste fundamentalmente en no descuidar la higiene y el aseo personal y evitar el contacto con personas infectadas. En tanto que para prevenir la reinfección, es necesario que la ropa de cama y las prendas de vestir deberán lavarse con agua caliente y jabón y secarse en secadora caliente o tenderse al sol.
Desde el Ministerio de Salud y Acción Social se aconseja ante los primeros síntomas consultar al médico en el hospital o Centro de Salud más cercano, quien indicará el tratamiento adecuado.