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Lo que el ministro del Ambiente me presentó no prueba que existan daños al cauce hídrico. No vamos a elevar este tema a las altas instancias hasta que no tengamos pruebas efectivas de la contaminación", manifestó la ministra de Relaciones Exteriores.Rachid señaló que este problema se manejará dentro de la Comisión Mixta Paraguayo-Argentina del río Paraná (Comip), que funciona desde la década del 60 y que es la administradora del ese cauce. "Los estudios técnicos estarán a cargo de esta comisión", acotó.
La canciller explicó que si se comprueba el daño ambiental el Gobierno paraguayo solicitará al Gobierno argentino que tome las medidas adecuadas para frenar los perjuicios al río.
La postura de Leila Rachid se contrapone a la del ministro del Ambiente Alfredo Molinas quien, a través de una nota, recomendó a la Cancillería nacional que pida a las autoridades ambientales de Argentina el cierre de la fábrica de celulosa por no contar con una planta de tratamiento de efluentes.
Molinas pidió la clausura temporal de la papelera argentina mientras encaran la construcción de un sistema de tratamiento o de un reservorio donde arrojar sus efluentes. La solicitud de cierre se realiza "a fin de evitar un daño mayor e irreversible al cauce hídrico", argumentó Molinas e indicó que el pedido se enmarca dentro de la Política Ambiental Nacional que busca precautelar los recursos naturales. (Fuente: Ultima Hora - Paraguay)