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ázquez dijo que la lista que encabeza –la Nº 7– pretende normalizar administrativamente la obra social luego que “los compañeros en alguna oportunidad se equivocaron al emitir su voto” para elegir autoridades. En ese marco, denunció: “Acá hay gente que ha tenido la oportunidad durante ocho años de manejar la obra social y ha dejado a nuestra familia municipal totalmente a la buena de Dios. Hoy no tienen un servicio mínimo y muchos están esperando los reintegros desde hace seis o siete meses”.Según el dirigente, de esa situación “se han beneficiado algunos pocos y han perjudicado a muchos” e, incluso, “de los 10 u 11 millones de pesos que se recaudan por mes, se destinan casi 3,5 millones únicamente a la compra de medicamentos, y se descuidan muchísimos servicios más”. En ese orden resaltó la falta de oftalmólogos, kinesiólogos, odontólogos y auditores médicos.
Según indicó, de enero a abril de 2005 en la compra de medicamentos se gastaba entre 1,2 y 1,4 millones de pesos, y el entonces interventor Miguel Sampietro autorizó a gastar hasta 2 millones.
“Por algo el gobierno trató de inútiles a la gente de la Federación de Municipales y sacó del cargo a quien era presidente del Iosper, Francisco Medero. Lo mismo hicimos nosotros con Adrián Gómez (ex gerente de Prestaciones)”, sostuvo.