C
on estos materiales, AGMER continúa una discusión que se debe dar en cada establecimiento de la provincia respecto de temas largamente postergados: ¿En qué condiciones está la escuela en la que trabajamos a diario? ¿Con qué instrumentos lo hacemos? ¿Qué riesgos presenta el local escolar para docentes y alumnos? ¿Cómo afecta todo esto a nuestra salud y a la calidad de la enseñanza? ¿Cuáles son las necesidades no cubiertas en cada establecimiento educativo?El Formulario de evaluación que se completará en cada establecimiento educativo permitirá constatar de manera detallada cuál es la realidad que se vive en cada escuela y será un valioso documento que aportará datos certeros en la mesa paritaria, de la que debe surgir una política de mantenimiento e inversión en infraestructura escolar, hasta hoy ausente en el Estado provincial.
Sabemos que es obligación, y un compromiso asumido por el gobierno provincial, realizar este relevamiento, pero hasta ahora no lo ha hecho. Además, AGMER entiende que la mejor forma de llegar a constatar el estado de la infraestructura escolar es consultando a los propios actores de la educación que sostienen a diario la escuela pública.