E

l predio del ex vivero municipal de Paraná, cedido en 2012 al gobierno provincial con destino a la construcción del Estadio Único de Entre Ríos, finalmente retornó al dominio comunal. Se trata de 51 hectáreas emplazadas sobre el acceso norte a Paraná, que habían sido donados al Gobierno provincial para el emprendimiento. La recuperación de los terrenos fue dispuesta por la ordenanza N° 9.392, sancionada el 21 de abril, autoría del concejal Luis Díaz (massismo) y promulgada ahora por el intendente Sergio Varisco. En junio del año pasado, un proyecto similar había sido presentado en el HCD paranaense, pero fue derivado a comisión y luego olvidado. La ordenanza refrendada por Varisco se ampara en la cláusula de la norma similar, aprobada en el mes de junio del año 2012 y registrada bajo el N° 9012, que fijaba un plazo de 42 meses, contados a partir de la toma de posesión de los terrenos por parte del gobierno provincial, para la construcción de la obra. “Al no haberse concretado ningún tipo de trabajo o avance para dar cumplimiento con el objetivo para el que fueron destinados los inmuebles en cuestión y no existiendo constancia de la toma de posesión de estos por parte de la provincia, incumpliéndose por ende el cargo con el que se efectuó la donación”, se señala en los fundamentos de la ordenanza N° 9392, “es razonable el recupero del predio para la hacienda del Estado municipal”. Se añade más adelante que “transcurridos más de 42 meses de la promulgación de los instrumentos legales, se infiere que no existe voluntad de efectivizar el Estadio Único, por lo que es evidente que la finalidad, en los plazos comprometidos, es de cumplimiento imposible”. Mediante la ordenanza que deroga la cesión de los terrenos (N° 9.392), se solicita al Departamento Ejecutivo Municipal la derogación del decreto N° 871, de donación de los mismos por parte de la gestión de Blanca Osuna en Paraná al gobierno de Sergio Urribarri en la provincia. El Estadio Único El proyecto, que cumpliría con toda la reglamentación que exige la FIFA, preveía una superficie de 60 hectáreas y un estadio multieventos cerrado para actividades vinculadas al básquet, al handball y al tenis, y para eventos artísticos. También, un sector destinado a actividades olímpicas, con una pista olímpica para alto rendimiento, canchas auxiliares, un sector para tenis con gradas y plateas, y una pileta olímpica, además de un sector parquizado para playas de estacionamiento. La capacidad sería de 30.000 espectadores sentados y la posibilidad de ser ampliado a 12.000 más.