E
l vicegobernador Adán Bahl, visitó la fundación Casa Lázaro que creó el Arzobispado de Paraná para brindarles oportunidades y reinsertar a jóvenes con problemas de adicción. “Este tipo de espacios son fundamentales si pensamos en armar redes que contengan y ayuden a sanar a nuestra comunidad”, dijo Bahl luego del encuentro con los huéspedes de la casa.
El vicegobernador se reunió en la sede de la Fundación con los trabajadores y con los 27 jóvenes que ingresaron por propia voluntad buscando oportunidades. Allí ratificó el compromiso por la lucha contra el narcotráfico, el narcomenudeo y el de trabajar codo a codo con las instituciones y organizaciones que asisten a los jóvenes que han caído en el flagelo de las drogas.
“Esta Fundación se propone una terapia basada en valores, en recuperar la dignidad de las personas. En este sentido, los jóvenes aprenden oficios en la práctica diaria de distintos talleres -como tapicería, producción de bloques de cemento, panadería, carpintería, vivero- lo cual les da la posibilidad de recuperarse a través del trabajo”, resaltó Bahl.
“Resultan espacios fundamentales si pensamos en armar redes que contengan y ayuden a sanar a nuestra comunidad”, remarcó Bahl y agregó: “Necesitamos contar con instituciones que les abren las puertas a los jóvenes en todo momento, también en las situaciones más difíciles de su vida”.
Por último hizo hincapié la necesidad de fortalecer los vínculos entre el Estado y las instituciones y organizaciones de la ciudad y en este sentido sostuvo: “En Paraná hay muchas personas organizadas y comprometidas para dar una mano a los demás, para cuidar a los vecinos que necesitan ayuda, para solucionar situaciones sociales urgentes, y el Estado provincial y local debe acompañar y colaborar con esta tarea”.
Redes comunitarias e institucionales
El Director de casa Lázaro, Jorge Achor habló de las tareas que realizan con los huéspedes y de la vinculación y ayuda permanente del Estado provincial; también destacó la colaboración permanente de los vecinos y de la sociedad en su conjunto.
“Son jóvenes, alrededor de 27, que eligieron buscar otras vivencias y que para ellos acudieron por ayuda y acá nosotros trabajamos en un proceso integral de rehabilitación, recuperación física, mental, económica y para eso les proponemos metas a largo plazo basadas en la reinserción con su familia y en la sociedad”, contó el responsable.
Matías, coordinador de la casa explicó que: “se los capacita en un oficio laboral, para eso tenemos los talleres de tapicería, panadería, vivero, huerta, construcción de bloques de cemento y ellos eligen en cual participar, según como se sientan más cómodos y también se les brinda asesoramiento escolar para que puedan completar sus estudios primarios y secundarios”.
Por último contó sobre los nuevos proyectos. “La ayuda permanente de la provincia, en este caso la Vicegobernación, es un impulso para seguir creciendo, porque ahora estamos ampliando la casa para poder recibir a nuevos jóvenes y para que los que ya estamos acá podamos estar mucho más cómodos”.
