E
l ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, afirmó que "con el nuevo cuadro tarifario de gas aumentará sólo un 203%" en promedio para usuarios residenciales, y que el objetivo del Gobierno es trazar un "sendero gradual y previsible de incremento que permita acortar la brecha entre el costo de producir el gas, y la tarifa que pagan los consumidores". El titular de la cartera de Energía y Minería remarcó que el servicio de gas en la Argentina "está distorsionado, es desigual, injusto y arcaico", que sólo el 60% por ciento de la población accede a la red y el 40% restante recurre a fuentes alternativas como el Gas Licuado de Petróleo. También señaló Aranguren que "en invierno estamos importando un tercio de lo que necesitamos", y que el gobierno nacional implementó los conceptos de tarifa social para apoyar "a los que realmente lo necesitan y están en una situación de vulnerabilidad", como también el uso responsable del consumo. Aranguren aseguró que en el actual esquema detectó "superposición de subsidios, inequidades y regulaciones acumuladas durante años" y lo calificó de desigual porque "los hogares que no tienen acceso a la red de gas natural pagan cuatro veces más por el combustible alternativo", como el gas licuado de petróleo. Además, lo consideró "injusto" porque "no contiene" a los más vulnerables y, por el contrario, "subsidia proporcionalmente más a los de mayores ingresos". Por último, lo describió como arcaico porque "genera poco incentivo al ahorro y se desentiende del impacto ambiental del mayor consumo de combustibles fósiles".