A pesar de que el gobernador y el intendente pidieron reducir la cirulación, los dueños de gimnasios reclamaron un ayuda al sector. Hicieron una caravana a Casa de Gobierno, de la que también participaron hoteleros y gastronómicos.
P
ese a las advertencias del gobernador Gustavo Bordet y del intendente de Paraná, Adán Bahl, sobre la necesidad de reducir la circulación en las calles, integrantes de la Cámara de Gimnasios de Paraná se manifestaron este miércoles en una caravana de autos en reclamo de una asistencia económica para el sector. Es la tercera manifestación de los propietarios de gimnasios.
La protesta se concentró en sobre calle Santa Fe, frente a Casa de Gobierno, junto a transportistas, hoteleros, gastronómicos y prestadores turísticos.
"Lo único que pedimos es una respuesta porque ya golpeamos todas las puertas, presentamos todas las notas, fuimos a todas las reuniones, pero no tenemos ninguna respuesta", sentenció.
"Somos conscientes que la situación no es para abrir. Luchamos por una ley de emergencia para los gimnasios, que nos den una ayuda", indicó Scocco al comentar que ayer mantuvieron una reunión con gente del ministro Bahillo, quien se había comprometido a recibirlos.
"Acercamos las propuestas que tenemos porque lo que nos preocupa es que será inviable retornar a los gimnasios con el nivel de deuda por impuestos que generamos en estos 121 días", explicó.