Ingresó el proyecto de ordenanza en Paraná. La medida incluye penas de arresto, pero exceptúa a los tarjeteros habilitados. El principal argumento son situaciones de inseguridad y amenazas.
E
n la última sesión del Concejo Deliberante de Paraná ingresó un proyecto de ordenanza, promovido por los legisladores Walter Rolandelli, Francisco Avero y Maximiliano Rodríguez Paulin (Juntos por el Cambio), que prohíbe la actividad de los cuidadores de coches rentada en todas sus formas y bajo cualquier denominación que se utilizare.
La medida incluye a los cuidadores de autos, cuidacoches, estacionadores
o lavacoches, exceptuando la actividad de los Tarjeteros debidamente
inscriptos. La iniciativa tomó estado parlamentario y pasó a la comisión
respectiva para ser analizada por los ediles.
Avero indicó que “esta práctica es extorsiva” y que hay “una apropiación del espacio público” por parte de quienes ejercen estas actividades.
Manifestó que “lo que impulsa esto es la situación social
que se ve y el reclamo de los vecinos” dado que “ante estas situaciones
extorsivas aparecen autos rayados o amenazas”. Y acotó que las sanciones
previstas “son las que marca la justicia de faltas, que pueden ser días de
arresto, tareas comunitarias y demás”.
Interrogado acerca de por qué es necesaria una ordenanza al
respecto, si el accionar constituye un delito, dio cuenta de que “en la
realidad nos encontramos con que los ciudadanos hemos realizado este tipo de
denuncias en la Policía y son minimizados. Entendemos que trabajando de manera
conjunta la municipalidad con la policía, tendría un mejor resultado”.
Precisó que “al contralor lo ejercería la municipalidad a
través de la Secretaría de Ordenamiento Urbano. De oficio podría actuar y los
ciudadanos tendríamos la posibilidad de denunciar esta actividad”.
El proyecto
En su artículo 1°, la iniciativa establece que “queda
prohibida en la ciudad de Paraná la actividad de cuidadores de coches en la vía
pública, rentada, en todas sus formas y bajo cualquier denominación que se
utilizare (como por ejemplo cuidador de autos, cuidacoches, ayudantes,
estacionadores o lavacoches) en lugares habilitados” y exceptúa a los
tarjeteros debidamente inscriptos según Decreto N° 473/2004.
El proyecto de ordenanza exceptúa a los tarjeteros debidamente inscriptos según Decreto N° 473/2004.
También dispone que el Departamento Ejecutivo Municipal proceda a realizar los estudios de factibilidad técnicos y económicos a los fines de crear “una aplicación electrónica y disponer centros móviles de denuncia, para anoticiar de forma anónima la actividad de estacionamiento, cuidacoches y/o limpiavidrios ilegales, garantizando la actuación inmediata de la Secretaría Seguridad Vial, Movilidad y Ordenamiento Urbano, y así iniciar el correspondiente proceso de faltas”.
Fundamentos
En los fundamentos del proyecto, los concejales del Junto por el Cambio relacionan la necesidad de la prohibición de la actividad ilegal de cuidacoches con problemas de inseguridad. Concretamente, mencionan “la preocupación demostrada en tal cuestión por distintos sectores de la ciudadanía, en virtud de incontables hechos de inseguridad que se viven a diario a causa de los trapitos y limpiavidrios que se encuentran a lo largo y a lo ancho de toda nuestra ciudad, hace necesario abrir un ámbito de participación ciudadana donde todos los sectores involucrados en el tema aborden esta temática”.
Puntualiza que la finalidad de la propuesta es “prohibir en la ciudad de Paraná el servicio de estacionamiento, cuidado de vehículos y limpieza de vidrios en la vía pública, sin autorización legal del municipio”, y sugiere la aplicación de penas “como ser el arresto, trabajos no remunerados de solidaridad con la comunidad, multas y clausura”.
Los concejales señalan: “No se puede permitir la apropiación ilegal del espacio público habilitado; principalmente porque robos, arrebatos, amenazas, extorsiones, son algunos de los delitos a los que nos tienen acostumbrados estas personas que se creen dueños del espacio público y que se han ido acrecentando en los últimos días”. Por lo tanto, aclara que la normativa busca “una doble protección, la del espacio público y la del ciudadano amenazado e intimidado”.
"El ejercicio de esta actividad va en desmedro del derecho que le asiste a todo ciudadano al estacionar su vehículo en un lugar público habilitado como la costanera, el balneario Thompson, donde no se debe abonar por el uso de ese espacio público”, explicaron.
También recuerdan que en Paraná ya existe un sistema de
estacionamiento medido que regula las zonas donde se debe abonar por el uso del
espacio público. Pese a esto, remarcan que “es normal que en dichas zonas
convivan ambos sistemas, imponiendo al ciudadano una doble obligación
económica, que de no ser satisfecha conlleva una multa por parte de la
Municipalidad y una amenaza por parte del cuidacoches o limpiavidrios”. Luego,
ejemplifican que “desde hace mucho tiempo algunas zonas de nuestra ciudad
cuando hay partidos de fútbol, eventos masivos y boliches, están bajo el
control de grupos peligrosos que exigen sumas de dinero bajo amenaza y la
apropiación ilegal del espacio público”.
Además, se refieren en la norma a “la intimidación, amenazas y peleas entre cuidacoches, limpiavidrios y otros trabajadores en la informalidad también afectan la autonomía física, desprotegiendo a toda la ciudadanía, como así también al turismo”.